La pasteurización es esencial para garantizar la eliminación de microorganismos dañinos como la Salmonella. Aunque los huevos limpios de gallinas saludables y manejados higiénicamente ya tienen un bajo riesgo, la pasteurización añade un nivel adicional de seguridad, especialmente valioso cuando se consumen productos de huevo crudo como la mayonesa.
Además, en medio de debates sobre enfermedades como la gripe aviar, es reconfortante saber que hay alimentos que reciben tratamientos eficientes diseñados para mantenerlos seguros. Los ovoproductos son derivados del huevo que se han sometido a calor para eliminar bacterias y otros patógenos. Esta pasteurización no solo se dirige a la Salmonella, sino también a otras bacterias y virus, incluido el H5N1, el causante de la gripe aviar más grave.
Desde 1991, en España, la industria ha visto un aumento en la producción de ovoproductos, especialmente después de la prohibición del uso de huevo fresco en restauración colectiva. Estos productos, que varían desde líquidos hasta congelados, ofrecen numerosos beneficios para la industria alimentaria, como seguridad bacteriológica, facilidad de manipulación y versatilidad.
Al llegar a las plantas de procesamiento, los huevos se limpian y refrigeran antes de la pasteurización, asegurando la eliminación de patógenos y preservando las propiedades del producto. Al utilizar huevos pasteurizados, la industria garantiza alimentos más seguros y reduce los riesgos para la salud, lo que debería ser una prioridad para todos, especialmente cuando se trata de alimentar a nuestros jóvenes.